domingo, 3 de febrero de 2008

Poemas en cuatro patas (collage-poesia, 2006)

Según el mito de Orfeo
la poesía sirve para acallar fieras.
No sabe el mito que las fieras son fieras
porque casi siempre callan.
















Quería acallar las fieras Orfeo
con su canto.
Las fieras esperaron pacientes
por su silencio.














La poesía, piensa algún filósofo,
traduce el canto de dioses y animales.
Los animales aprendieron hace tiempo
que los dioses se fueron y su original ya no existe.
















Lloran los seres naturales,
piensa otra filosofía con más oído,
porque están condenados al silencio.
Pero ese era el pacto entre dioses y animales.















Quizás si acallara un poco lo orfeo
lograra oír el rumor
difícil y seductor
de mis animales de adentro.
















El ruido que hacía la joven leona
era un gruñidito pero suave
por culpa de la belleza lejana
de las gacelas.














Es que quizás a la belleza
de las jirafas al amanecer
sólo corresponda ya un gruñidito
de un literal desconsuelo.















Nada pareciera responderle
al orix hermosísimo en el desierto.
De todos aquellos dioses callados
este me pareció el más silente.














Jirafa mantis de los dioses del cielo
desierto, a veces nos miraba
como el camello para enseñarnos
la paciente mirada.















¡Pequeño dios terco, camello
y perseverancia desierta,
muéstranos las formas antiguas
de olvidar nuestras cargas!














Del dios de la lluvia sabían los antiguos
que era un dios elefante y que lloraba
porque antes nos sabíamos todos
pequeños








Dijo un poeta que los dioses
ha tiempo huyeron a sus guaridas lejanas,
como conejos quedamos nosotros
a la intemperie
de la poesía

2 comentarios:

carlos dijo...

que bello todo el blog.
felicitaciones
te mando un beso
Carlos E. Palacios

miss *ann dijo...

me encantaría contactarla a un correo electrónico, con motivo de mi tesis de grado.

saludos,
aniella ernández
ann.ernandez@gmail.com